Mediante un acto conjunto celebrado el pasado jueves 20 de abril en el puerto de Ensenada, el gobierno nacional acompañado por las autoridades de la provincia de Buenos Aires oficializó el llamado a licitación para comenzar con la habilitación del Canal Magdalena. Tras una serie de avances y retrocesos en la gestión de esta medida, fue anunciada la convocatoria para los concursos públicos en tareas de dragado y balizamiento de la obra, que conectará al sistema fluvial del litoral con la plataforma marítima de la República Argentina.

El gobernador bonaerense Axel Kicillof destacó la importancia del Magdalena como una infraestructura estratégica, indispensable para el ejercicio de la soberanía nacional ya que permitirá el tránsito directo por la costa nacional argentina sin necesidad de solicitar la autorización del estado uruguayo. Además, subrayó los beneficios económicos que reportará la apertura del Magdalena, también llamado Canal Sur, tanto para las arcas nacionales y provinciales como para las empresas locales que trabajan con la carga y el transporte de granos y materiales pesados.

Kicillof atribuyó la realización de este proyecto al apoyo y acompañamiento de las organizaciones políticas y militantes, quienes lograron sostener la importancia del Magdalena dentro de la opinión pública durante los últimos años. A su vez, agradeció la voluntad política de distintos representantes y funcionarios presentes durante el anuncio, quienes impulsaron la ejecución de esta medida. “No puede ser que los argentinos tengamos que pedir permiso para navegar libremente por nuestros ríos y mares”, sostuvo, y agregó: “La solución a esa deuda que tenemos hace mucho tiempo se llama Canal Magdalena".

El gobernador también realizó una breve historización de la discusión en torno a los beneficios del Canal, que se remonta a la época del Virreinato del Río de la Plata y los albores de la república. Finalmente recordó que la obra estaba destinada para comenzar a ejecutarse en 2015, pero que el proyecto fue abandonado por la gestión del ex Presidente Mauricio Macri luego que la documentación y los informes referidos al Canal se extraviaran de forma irrecuperable.

En el mismo sentido, el Presidente argentino Alberto Fernández se refirió a la habilitación del Magdalena como una obra indispensable para el desarrollo soberano del país, a la vez que comentó las dificultades y presiones externas que impidieron avanzar con este proyecto en años anteriores. Fernández se refirió a la habilitación del Magdalena como parte de un programa que incluye la creación de un ente para la regulación del circuito fluvial Paraguay-Paraná, también conocido como Hidrovía, que comenzará a funcionar en la ciudad de Rosario.

Una oportunidad para el desarrollo soberano

Si bien la habilitación y puesta en funcionamiento del Canal Magdalena fue reseñada durante el acto conjunto como una obra destinada a favorecer la industria cerealera, su apertura implica la posibilidad de comenzar a desarrollar el potencial productivo del Mar Argentino y lograr una plena integración de los territorios australes y antárticos. De acuerdo con diversos proyectos e investigaciones, el uso del Magdalena tiene el potencial para vehiculizar el transporte y el tránsito marítimo por la costa atlántica, promoviendo la reactivación de la industria naval en Argentina.

Otro de los aspectos más vinculados con el desarrollo soberano se encuentra en la reducción de costos para el transporte de la industria electrónica radicada en la provincia de Tierra del Fuego, ya que permitiría expandir la oferta de servicios en la producción de insumos tecnológicos que actualmente deben ser importados por la falta de competitividad en este sector. Al permitir el transporte por mar, la logística de la industria fueguina podría desplegarse a escala regional e incluso continental, debido a su posición privilegiada dentro del corredor bioceánico.

Por la noche del mismo jueves, durante la reinauguración de la sala principal del Teatro Argentino de la ciudad de La Plata, el gobernador Axel Kicillof se refirió al acto conjunto celebrado en el puerto de Ensenada y destacó ante la audiencia que la habilitación del Canal Magdalena es una obra pensada para recuperar la soberanía nacional sobre el Mar Argentino, mejorar la integración con la patagonia e incrementar los recursos para el desarrollo de la industria naval argentina. “Abrir el Magdalena es mirar hacia Malvinas”, destacó Kicillof, “es mirar hacia el Mar Argentino y también hacia la Antártida”.

Aunque durante los anuncios del acto no se haya profundizado en este aspecto, la habilitación del Canal Magdalena también influye sobre la posición soberana de Argentina en el continente blanco, ya que forma parte de una serie de obras estructurales indispensables para ejercer el control y monitoreo de su territorio. En paralelo a las obras del canal, se prevé instalar en Ensenada un dique flotante para conectar a esta planta naval con la base integrada de la Armada Argentina en la ciudad de Ushuaia, motivo por el que se considera que la habilitación del Magdalena es un proyecto con carácter geopolítico para la región de América del Sur.

 FUENTE:

 TELAM

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Por Agenda Malvinas