En una insólita cadena de desaciertos y contradicciones, ha quedado enredada la senadora nacional por Tierra del Fuego (FdT) María Eugenia Duré, luego que este jueves 29 a las 19:32 enviara a través de su cuenta oficial de la cámara alta maria.dure@senado.gob.ar, una masiva salutación de fin de año, con un mapa de Argentina donde las Islas Malvinas aparecen como Falkland Islands (GB); mensaje que ayer viernes a las 16:57 calificó de fake news al asegurar en un tuit que le habían “HACKEADO” la cuenta oficial, y que por esa razón había iniciado “una investigación interna” para luego realizar “la correspondiente DENUNCIA PENAL”. Sin embargo, esta madrugada borró lo que había afirmado en su cuenta de twitter @EugeniaDureTDF, generando un mayor desconcierto y descrédito en cuento a que su correo electrónico oficial fuera violado y manipulado, y no que se tratara de un error propio o de sus asesores.

Lo cierto es que la salutación con la leyenda: “2023, que nos encuentre unidos y en paz” de Duré, acompañada con un mapa de Argentina y las islas con la denominación colonial británica; llegó a más de un centenar de correos electrónicos, entre los cuales se encuentran, el de la propia vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, la totalidad de los miembros de la cámara alta, la Secretaría de Malvinas de la Cancillería y hasta de la embajada de Uruguay en la Argentina; varios de los cuales quedaron entre atónitos y furiosos frente a la gravedad institucional que significaba.

Como Agenda Malvinas informó ayer, María Eugenia Duré no es cualquier senadora, a la cual podría caberle la distracción o el desconocimiento en la materia; sino que se trata de una parlamentaria que representa a la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, en cuya jurisdicción se encuentra el archipiélago malvinero. Siendo a su vez, miembro del Consejo Nacional de Asuntos Relativos a Malvinas; un organismo creado por la gestión presidencial de Alberto Fernández, que no solo no ha producido un solo acto concreto destinado a resolver la disputa de soberanía de Malvinas, sino que además no ha logrado capacitar a sus propios miembros en cuanto a la pertenencia argentina del archipiélago usurpado por Gran Bretaña el 3 de enero de 1833.

Más aún cuando en su rol de senadora, fue impulsora de la Ley Nacional 27.671, la que obliga a las personas que trabajan en la función pública nacional, “recibir una capacitación obligatoria, periódica y permanente sobre la Cuestión de las Islas Malvinas”.

Por Agenda Malvinas